La diputada María Cepeda dijo que se confeccionaron prácticamente en secrecía, sin la participación de padres de familia, maestros y expertos en la materia. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Este martes, durante la sesión de la Diputación Permanente de esta semana en el Congreso del Estado y contando con la visita de diversas asociaciones de padres de familia de escuelas e instituciones educativas, se aprobó un punto de acuerdo presentado por la diputada María Bárbara Cepeda Boehringer, mediante el cual se exhorta al Gobierno federal para que, a través de la Secretaría de Educación pública y en coordinación con expertos y profesionales de las ciencias de la educación y la pedagogía, se lleven a cabo los estudios analíticos pertinentes para garantizar la calidad en el contenido de los nuevos libros de texto gratuitos para el ciclo escolar 2023-2024.
La propuesta de los actuales libros de texto para las escuelas se elaboró sin cumplir lo establecido en la Ley General de Educación, que señala que deberían ir de acuerdo a los planes y programas de estudio. Se confeccionaron prácticamente en secrecía, sin la participación de padres de familia, maestros y expertos en la materia, según manifestó la diputada en tribuna del Congreso del Estado.
“Pregúntense ustedes ¿permitirían que en sexto año sus hijos aprendieran de un libro con más de 215 errores gramaticales? Asimismo, al utilizar un lenguaje inclusivo vemos que lo abordan de una manera incorrecta, a lo que le sumamos errores en español, ciencias naturales, historia, matemáticas, geografía, etcétera”, señaló.
De igual manera, dijo que el contenido de dichos libros ha sido puesto en tela de juicio ya que principalmente las matemáticas parecen ser relevadas a un segundo plano, reduciendo su contenido en más de un 75%, no obstante, en un entorno globalizado, los menores deben prepararse bajo un nuevo esquema de competencias en el que predominen los idiomas, la habilidad matemática, la creatividad y la tecnología.
Aunado a lo anterior, dijo que en ese sentido, es obligación por mandato de ley, que el Estado garantice el derecho a la educación y que los estudiantes reciban conocimientos y aprendizajes significativos, relevantes y útiles para que alcancen su máximo potencial.
“Como mexicanos, debemos exigir que la educación de los futuros ciudadanos deje de ser vista como un bastión de poder o un mecanismo de control y comience a ser un auténtico catalizador de talentos. Hoy soy la voz de las niñas, niños y adolescentes que se suma a la de los padres de familia, maestros, académicos, pedagogos y sociedad civil organizada, para exigirle al presidente que se revise detenidamente el contenido de los nuevos libros de texto gratuitos para no poner en riesgo la educación”, destaca la diputada María Bárbara Cepeda en el punto de acuerdo aprobado.
