Se dio a conocer el posicionamiento del grupo organizador, que además se deslindó de cualquier partido político. (VERÓNICA RIVERA)
La asamblea organizadora de la movilización "Marchemos juntas, hermana" del pasado 8 de marzo de 2023 en Torreón, denunció públicamente la intervención de la regidora Blanca Álvarez Garza, lo que consideraron como sabotaje y provocación por parte de la autoridad.
Además, negaron que haya sido “un saldo blanco” al final, pues aseguraron que sí hubo participantes agredidas físicamente por parte de elementos de la Policía Municipal y de la Fiscalía, que resguardaron en todo momento la Plaza Mayor y sus alrededores.
Fue a través de las redes sociales que se dio a conocer el posicionamiento del grupo organizador, que además se deslindó de cualquier partido político.
“Las convocantes organizadoras llegamos puntuales a la cita y al intentar iniciar con el acomodo de los contingentes, nos dimos cuenta que la sexta regidora del municipio de Torreón, Blanca Álvarez Garza, afiliada al partido PRD, ya había dado inicio a la marcha, encabezando y dando instrucciones por medio de un megáfono".
"Al cuestionar a Tránsito y Vialidad sobre esto, la respuesta que obtuvimos fue que ‘las organizadoras del evento’ habían llegado desde las 3:00 p.m., dando inicio a este mismo en punto de las 5:00 p.m., dado que la marcha era un evento organizado por el Municipio”, reza el documento.
Y agregaron: “Las mujeres organizadas de esta asamblea entendemos estas acciones como una clara manifestación de apropiación, sabotaje y provocación por parte de las autoridades municipales. No permitiremos que el gobierno de esta o cualquier otra ciudad se apropie del trabajo que las colectivas feministas y mujeres independientes organizadas hemos realizado durante años”.
Lamentaron el actuar de la regidora, el cual aseguraron puso en riesgo a las miles de asistentes a la movilización.
“No tomó en cuenta ninguna de las estrategias que el equipo de seguridad de la marcha prepara en cada movilización, con el fin de salvaguardar a las asistentas”.
Asimismo, recalcaron que aunque las autoridades reportaron un “saldo blanco”, sí hubo agresiones físicas.
“Sí existieron agresiones físicas a varias compañeras, recibieron codazos y patadas por parte de la Policía Municipal y Fiscalía, tenemos compañeras que al día de hoy tienen golpes visibles, moretones y arañazos en el cuerpo recibidos por parte de las autoridades. Esto no sólo constituye una criminalización de la protesta sino un completo abuso de autoridad, varias de las compañeras agredidas no estaban haciendo absolutamente nada ilícito al momento de las agresiones”.
