Diario de aprendizaje, herramienta formativa para alumnos y docentes

Hoy en día abundan las estrategias de aprendizaje para acrecentar su eficiencia y lograr los objetivos dentro de este proceso. El diario de aprendizaje funge como una estrategia en el camino de la construcción del conocimiento.

Es un soporte que puede elaborarse en distintos medios, de acuerdo a la edad y recursos del estudiante. Existen diferentes formatos y su elección dependerá de la adaptabilidad al alumno o alumna. La Secretaría de Educación Pública propone los siguientes:

• Libreta. Es el más accesible y permite el uso de dibujos, collage, fotos, esquemas, texto o combinaciones de éstos.
• Audio. En formato de podcast.
• Video. Se utilizan recursos accesibles y fáciles de usar, como la cámara de un celular.
• Blog. Es posible realizar un blog o una página en blogger o wordpress.
• Libro virtual o documento compartido. Si hay acceso a internet y el manejo de tecnologías es esencial dentro del proceso de aprendizaje, puede optarse por usar Google Docs.

Contenido

Es posible determinar un contenido específico o integrar varios, tales como: las emociones o sentimientos experimentados (diario personal), aprendizajes adquiridos (diario de clase); dificultades enfrentadas, progresos alcanzados, dudas o avances en el desarrollo de un proyecto de investigación (diario de campo).

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Los puntos clave son la guía y el asesoramiento

Beneficios

La dependencia precisa que usar un diario de aprendizaje como estrategia didáctica ayuda a potenciar la expresión, reflexión y autoconocimiento o metacognición. Como herramienta de enseñanza ayuda a facilitar el seguimiento al aprendizaje de las y los estudiantes, por lo que es ideal incluirla dentro de la modalidad educativa a distancia.

Los estudiantes serán capaces de sistematizar la experiencia mientras que agudizan la capacidad de observación del entorno y forja el pensamiento crítico y analítico. Harán conscientes las emociones y aprendizajes a la par que fortalecen la memoria. Además, sirve como punto de partida para la escritura.

Por otro lado, los docentes podrán usarla como estrategia de evaluación para facilitar el seguimiento a la distancia y dar pauta a la retroalimentación a través del cual se muestra interés por el estudiante. Esto permitirá que se conozcan e identifiquen los estilos e intereses de cada uno.

Es posible partir de estos cuestionamientos diarios:

• ¿Qué hemos trabajado hoy?
• ¿Qué es lo que se me ha dado mejor?
• ¿Qué debería mejorar?
• ¿Cómo puedo mejorarlo?