Por tierra, mar y cielo, el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador le ha dado mayor poder al Ejército y la Marina en el sector transporte, una situación que, de acuerdo con especialistas, ha perjudicado el desempeño logístico del País e incluso ha entorpecido el comercio.
Actualmente, el Ejército y la Marina han asumido el control y vigilancia de los puertos y aduanas marítimas y terrestres.
En algunas aduanas no siempre está un militar a cargo, pero cuando eso sucede, los criterios no son claros, según expertos.
El argumento es el combate a la corrupción, el contrabando y el narcotráfico.
Para Ignacio Szymanski, expresidente de #SoyLogístico Asociación, el efecto de haber dado el control de las actividades a militares y marinos es que México descendió en el Índice de Desempeño Logístico (IDL) que realiza el Banco Mundial de la posición 51 a la 66, de 139 países evaluados, entre 2018 y 2022.
Esta situación se ha agravado desde que los militares tomaron el control de los puertos, debido a su falta de conocimiento y experiencia en comercio exterior.El especialista indicó que las tareas de logística y de comercio exterior son de alta especialización y corresponde realizarlas a autoridades civiles.
