La ópera de prima de Adriana Ortega va lanzando intrigas con una prosa seductora (CORTESÍA)
No podemos sufrir en soledad sin tener consecuencias desastrosas. Parece que el sufrimiento siempre debe ser compartido, de lo contrario, nos volveremos locos o correremos el riesgo de ser consumidos por su furia. En ese sentido, la catarsis se convierte en un escudo invaluable. Llegué a esta conclusión después de leer Cuando los gatos esperan (diciembre de 2022), primera novela de la escritora torreonense, Adriana Ortega Calderón. Esta cautivadora obra forma parte de la Colección de Ficción de la Universidad Veracruzana. Ambientada a finales del siglo XIX, principalmente, en la ciudad de Versalles, es la historia de Álvaro Lucero, un bioquímico de 32 años, que emprende un largo viaje en barco, de más de treinta días, desde Argentina hasta Francia, país a donde va a trabajar en un laboratorio. Sin embargo, descubre que nada resulta como esperaba.
Principio del formulario
Álvaro ha contratado, a través de carta, hospedaje con la familia Berthier. Al arribo a la ciudad, afuera de la casa se encuentra una nota: "Fuimos a pasar en fin de semana a París con la familia de Geneviève. Estamos de regreso en un par de días. Puede tomar la llave del llavero que se encuentra colgado a un lado de la campana. Hay comida en la alacena. Bienvenido, Álvaro." Al ingresar al lugar lo reciben tres gatos, mismos que llevan el misterio en sus patas, al ir dejando huellas empolvadas. Ellos, siempre acechantes, esperan que les dé de comer. Pero los días pasan y los Berthier siguen sin aparecer.
La ópera de prima de Adriana Ortega, desde las primeras líneas va lanzando intrigas con una prosa seductora. Envuelve cada vez más al lector hasta contagiarle la desesperación del protagonista. Desde el inicio, la autora, va sembrando intrigas que poco a poco se van desvelando. No sabemos cómo es físicamente Álvaro, sólo deducimos que es alto, ya que hace referencia a que otro personaje es bajo de estatura; es como si la autora quisiera que el lector suplantara al protagonista para que sienta la decadencia del personaje. El argentino vive los días entre el trabajo y la llegada a casa en donde solo lo esperan los gatos. Se encuentra en una ciudad con clima hostil, tan hostil como los habitantes con los que convive. Por eso desea contarle a su amante Andrés lo que le sucede, pero desiste de hacerlo porque no quiere preocuparlo. Durante ese tiempo, Álvaro hace conjeturas, mientras nos interna en su delirio.
Cuando los gatos esperan, ha tenido muy buena acogida entre lectores y criticos, a un mes de su presentación en la Feria Internacional del Libro Universitario (FILU), en Xalapa, Veracruz, ya va por la segunda reimpresión. Se trata de una novela escrita en primera persona, la estructura es en tiempo es lineal. El lenguaje en ocasiones es poético y culto, ya que el narrador/protagonista es un hombre que tiene conocimientos de arte. Se trata de una prosa escrita con sutileza, aunque también con vehemencia.
Adriana Ortega Calderón nació en Torreón, Coah. (1975) ha sido editora de las revistas Amura, Dónde ir y Siglo Nuevo. Ha publicado poesía, cuento y ensayo en diversas revistas nacionales e internacionales. Ha realizado diversas traducciones literarias y producidos guiones para televisión. En Melbourne, Australia, fundó y dirigió la galería de arte Holly Gallery y expuso su obra en coautoría en la galería, House of Bricks. Ha asumido la dirección de contenido de importantes programas, como el Internet Governance Forum. Gestiona y dirige proyectos editoriales y ha tomado cursos de literatura en distintas ciudades del mundo.
La novela Cuando los gatos esperan está a la venta en Torreón, en la librería El astillero y por internet a través de la librería Carlos Fuentes.
