(SERGIO A. RODRÍGUEZ/ARCHIVO)
Desde delitos como robos, detenciones arbitrarias, abusos sexuales y hasta secuestros, han experimentado los migrantes que arriban a Monclova, esto desde que salen de su país hasta que llegan al suelo mexicano, en la frontera de Coahuila.
El padre Paulo Alfonso Sánchez Valencia, párroco de la comunidad del Verbo Encarnado de la Diócesis de Saltillo, quien se encuentra en el albergue de Frontera, informó que es durante el trayecto que se suscitan los eventos delictivos.
"Las principales denuncias que nos presentan es el abuso por parte de las autoridades de algunos municipios, el robo de su dinero, los bienes" dijo.
Añadió que entre otros eventos, han sido víctimas de grupos delictivos, entre los que destacan casos de secuestro, privación de la libertad, así como abusos sexuales.
Destacó que estás denuncias se reportan a la Comisión Estatal de Derechos Humanos ( CDHEC).
Expuso que a últimas fechas se atendieron ocho mil migrantes, de los cuales un 80 % dijo haber sido víctimas de delitos.
Aseguró que el 70% son mujeres y familias, que se han atendido en el albergue de Frontera.
Expuso que muchos de los migrantes que acuden a este albergue, llegan con problemas de desnutrición e insolación.
Aseguró que a ninguno de los que se han atendido, les interesa quedarse en la región, sino cruzar al territorio americano.
