La OMS recomienda consumir yema de huevo, carne, pescado y mariscos.
Durante el embarazo, la alimentación que lleve la madre es crucial, tanto para ella como para el bebé que está en camino, y uno de los padecimientos que se pueden evitar de esta manera es la diabetes gestacional.
De acuerdo a la Secretaría de Salud, para tener un buen metabolismo es necesario que durante el embarazo haya buena alimentación, actividad física, cuidado de la salud mental y buenas horas de sueño.
Según la dependencia, las mujeres que presentan altos niveles de glucosa están asociadas a las enfermedades cardiovasculares, la diabetes tipo 2 y a tener hijos con algún grado de obesidad.
La secretaría expone en un comunicado que “las mujeres que por primera vez desarrollan esta alteración reciben un plan de alimentación para el buen control de glucemia, metabólico, de lípidos e insulina, que permita disminuir el riesgo de complicaciones en el feto, como serían crecimiento excesivo, hipoglucemia, hipertrigliceridemia y sobrepeso al nacimiento. También evita complicaciones a la madre, sobre todo preeclamsia, hipertensión arterial y diabetes tipo 2”.
La ganancia de peso de cualquier persona es multifactorial, por eso los especialistas recomiendan que se analicen aspectos socioculturales y metabólicos de cada individuo, a fin de hacer recomendaciones sobre nutrición, que puedan dar una solución a cada uno de los problemas que pueda tener un paciente.