Previo al inicio de la temporada 1993 de las Grandes Ligas, los Mellizos de Minnesota y los Bravos de Atlanta jugaron una serie de pretemporada en la ciudad de Monterrey, en el flamante estadio Monterrey, el más grande y moderno de Latinoamérica (hoy llamado Mobil Super). Gracias a la gentileza de Mario Alberto Espinoza en aquel tiempo el hombre fuerte de Cervecería Cuauhtémoc en La Laguna, fuimos a cubrir la serie un servidor y mi buen amigo Jorge Cepeda junior encargado de la cámara.
Asistimos debidamente acreditados y con All Acces. Antes del primer juego (en una helada Sultana por cierto) deambulábamos por el terreno de juego a nuestro aire buscando a quien entrevistar, por los Twins los peces gordos obviamente eran Kirby Puckett (que descanse en paz) y Dave Winfield, a los dos tuve el privilegio de entrevistarlos, sobra decir que ambos fueron elegidos al Salón de la Fama.
En cuanto a lanzadores de Minnesota no contaba en ese tiempo con ninguna estrella sobre todo del nivel que manejaba su oponente en esa histórica serie en tierras regias. Kevin Tapani, Rick Aguilera y sobre todos los demás Scott Erickson que dos años atrás había ganado veinte juegos.
Con la ayuda del roster que nos fue proporcionado buscábamos al número 19 para hacerle la entrevista y nada que lo ubicábamos en medio de las prácticas de bateo y fildeo, y hete aquí que se nos acababa el tiempo y decidí entrevistar al primer mellizo con el que me tropezara, y así sucedió, casi me voy de bruces cuando el número 23 que fue tras una bola que casi se metió al dugout y le pregunté a bocajarro con mi inglés champurrado "¿Can you give me an interview please?" y accedió de amable manera, ese chavo de 22 años con el que platicaba a como Dios me daba a entender, dos años después procreó al mejor Mariscal de Campo de la actualidad en la NFL.
Pat Mahomes lanzador derecho que jugó once años en la Mayores con 42 ganados y 39 perdidos y que en 1999 se fue invicto en la loma con los Mets de Nueva York con marca de 8-0 a pesar de no abrir ningún partido. Por cierto, en ese 1993 no le fue nada bien al terminar la temporada con registro de 1-5 y 7.71 de efectividad. La fuerza del brazo derecho de Patrick la heredó de su padre Pat.
Siempre me quedará el recuerdo de entrevistar al papá de Patrick, digamos que es lo más "cerca" que he estado del mariscal de campo de los Jefes de Kansas City, que hoy buscará regresar a un Súper Tazón, se llevó la edición 54 siendo incluso el MVP. El papá de su rival en los controles del juego, Joe Burrow tiene como padre a Jim, que fue una estrella en el futbol americano canadiense, después de estar una temporada en la NFL con los Empacadores de Green Bay, siempre jugando como back defensivo. Después tuvo una larga carrera como coach colegial mayormente como coordinador defensivo.
Digamos que ambos padres; el de Mahomes y el de Burrow, no hicieron nada espectacular con sus carreras, pero fueron ejemplos de perseverancia para sus chavos, que ahora sostendrán un duelo hoy a las cinco y media de la tarde en Kansas City por el pase al SB, de los que ya los expertos consideran un nuevo clásico del tipo Brady-Manning.
Los Jefes han perdido tres seguidos contra los Bengalíes incluida la final de conferencia del año pasado, dejando escapar una ventaja tempranera de 21-3. Joe Burrow es el único quarterback que le ha ganado tres seguidos a Mahomes, es tal el grado de confianza de algunos jugadores de Cincinnati que ya bautizaron el estadio de los Chiefs como "Burrowhead Stadium".
La final de la temporada pasada entre estos dos fue épica, ganando los Bengalíes en tiempo extra con un gol de campo de Evan McPherson. Ya veremos hoy quien pasa una noche de celebración, si la familia del expitcher o la familia del exesquinero.