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Las palabras tienen la palabra

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El profesor y el profeta

JUAN RECAREDO

"¡Profe, profe!" Le llamábamos ansiosos a la maestra en primaria cuando queríamos lucirnos contestando una pregunta difícil o cuando queríamos pedirle permiso para ir al baño. "Profe" era una forma corta de decirle "profesora" que era algo un poco más respetuoso aún que el título de maestra. Ahora le dicen miss, que es una forma tomada del inglés y que a mí no me gusta, pero bueno, así son las modas del lenguaje.

Volvemos al profesor. Profesor o profesora es un término muy amplio, es decir que tiene muchas y muy diversas aplicaciones, aunque el diccionario de la Academia da de él una definición muy corta y muy concreta: "Profesor es una persona que ejerce o que enseña una ciencia o un arte…" y entonces profesar es ejercer o enseñar una ciencia, un arte o un oficio.

Vámonos entonces a las raíces etimológicas de la palabra profesar y nos encontraremos que el sufijo pro se refiere a algo que se hace en público y la otra parte del vocablo es fateri que es declarar, reconocer o confesar.

Concretamente el profesor es el que hace declaraciones públicamente o de una manera más específica "el que habla en público".

Junto al profesor tenemos al profeta que es el que hace o dice profecías, cosas que van a pasar, predicciones; sólo que el prefijo pro de profeta no es igual que el pro de profesor. El pro de profeta significa antes y la palabra se complementa con la raíz phetes que es el que habla. Entonces el profeta es "el que habla antes…", sí, claro, el que dice las cosas que van a pasar antes de que sucedan, porque después como dijo el perico: "¿pos ya pa' qué?"

Por ahí cerca anda también el prófugo, que es del que, como decía Lalo El Piporro: "Párenlo, ese hombre lleva delito…" "Llevo a Adelita, tu hermana" contesta el supuesto delincuente. Pues sí, el prófugo es el delincuente, el que comete un acto ilícito y luego se escapa, se fuga, de fugere que en latín viene siendo fugarse, escaparse o pelarse como decimos en el norte.

Y siguiendo por el mismo rumbo nos encontramos con el profano que es el tipo que se porta irreverente o irrespetuoso ante lo sagrado, y la palabra se origina en pro-fanum que significa "ante el templo", porque el profano es el que está "ante el templo" o "contra el templo".

Está también el proemio que es el prólogo o la introducción de un libro, lo que casi nadie lee y se lo digo por experiencia propia. Proemio viene de pro-oimos que significa "antes del camino".

La profesión es una ocupación u oficio que requiere estudios especiales y el que la ejerce es un profesional… o un profesionista. El que termina una carrera universitaria ¿es un profesional o un profesionista? Ésta es una diferencia que ha dado lugar a muchas polémicas y finalmente el Diccionario de la Lengua los da como sinónimos… o sea que podemos usar ambos términos indistintamente y nadie debe enojarse por ello.

También se entiende como "muy profesional" una persona que cumple fielmente con su trabajo, superando cualquier obstáculo que se le presente.

Soy Don Juan Recaredo… compártame sus dudas y comentarios.

donjuanrecaredo@gmail.com

Twitter: @donjuanrecaredo

ME PREGUNTA Brenda Huerta: ¿Sabe usted qué es un batiscafo?

LE RESPONDO: El batiscafo es una especie de embarcación sumergible preparada para resistir grandes presiones y destinada a explorar las profundidades del mar.

LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA: Una buena esposa siempre perdona a su marido cuando está equivocada.

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