VARIACIONES OPUS 33 SOBRE EL TEMA DE DON JUAN.
El caballero sevillano jamás llevó la cuenta de las mujeres a quienes poseyó, o que lo poseyeron a él. Solía decir:
-Los amores no son para contarlos, ni el sentido de numerarlos ni menos aún en el sentido de narrarlos.
Ninguno olvida, sin embargo. De todos conserva algún recuerdo: una exclamación de la dama en el culmen de la pasión; la sabiduría de una íntima caricia; el color canela de aquel busto que una mujer hermosa ofreció a sus manos y a sus labios.
Don Juan no guarda memorias de fama, de riqueza o de poder. Con los años ha aprendido que ésas son cosas deleznables. Vivió para el amor, y ahora el amor lo hace vivir. Ciertamente su cuerpo no es el de antes, pero su alma es la de siempre. Y el cuerpo recuerda porque el alma no olvida.
En su soledad acompañan a Don Juan todas las mujeres a las que amó un instante que durará toda la eternidad.
¡Hasta mañana!...