"TIENE MEMORIA DE ELEFANTE".
Eso se dice de quien es memorioso.
Sin embargo yo conocí a un elefante olvidadizo. No podía recordar su obligación de recordarlo todo. A veces no se acordaba ni siquiera de que era un elefante.
Eso le provocaba consecuencias impensadas. Una de ellas era que pesaba considerablemente menos que los demás elefantes. Los recuerdos pesan mucho, y él no cargaba ninguno. Sus compañeros le decían cosas feas, pero él las olvidaba al punto, lo cual lo hacía tener ánimo ligero.
Ahora diré de ese elefante algo difícil de creer. Es el elefante más viejo del mundo. Tiene la edad del primer elefante de la creación. Diré por qué. Se dice que cuando un elefante siente que va a morir va a un lugar llamado "el cementerio de los elefantes" y ahí se acuesta a esperar la muerte. El elefante de mi historia no recuerda dónde está ese cementerio, y por tanto sigue con vida.
De este relato saco una conclusión: es muy satisfactorio recordar todas las cosas, pero a veces es mejor olvidar algunas.
¡Hasta mañana!...