John Dee encontró la piedra filosofal después de 50 años de buscarla.
Con esa mágica materia podía fabricarse oro. Quien la poseyera sería el hombre más rico del mundo.
A nadie comunicó John Dee su hallazgo. No sólo eso: fue a lo más denso del bosque y arrojó la piedra a un profundo foso habitado por alimañas al cual nadie nunca se acercaba.
¿Por qué hizo eso? Porque pensó que así como no había podido resistir la tentación de saber tampoco podría resistir la tentación de tener. O sea que tuvo miedo de sí mismo. Tal es el mayor miedo que puede sentir cualquier humano, pues de todos tus enemigos puedes escapar, menos del que va contigo.
Ahora John Dee es feliz. Encontró algo mejor que la piedra filosofal: halló una mujer buena, y la desposó. El anillo de bodas que le dio no era de oro.
¡Hasta mañana!...