En otro tiempo el tiempo era más tiempo.
Quiero decir que transcurría más despacio, con lentitud morosa.
-Papá: ¿cuánto falta para la Navidad?
-Una semana.
Y aquella semana parecía eterna.
¿Cuánto duró este año?
Nada.
Y el próximo ¿cuánto durará?
Menos que nada, si es que acaso dura.
". Pues si vemos lo presente / cómo en un punto se es ido / y acabado, / si juzgamos sabiamente / daremos lo no venido / por pasado.".
Los versos de Manrique, con el ritmo de las campanas que doblan a muerto, dicen una verdad viva.
Gocemos el día, entonces, Gocemos cada hora, cada instante. ¡Se van tan pronto! Con ellos se va la vida y nosotros nos vamos.
Vivamos plenamente, y hagamos más recuerdos para vivirlos después. Mañana.
Mañana será otro día.
(Quizá).
¡Hasta mañana!...