Necesario las estructuras físicas y humanas para afrontar incremento de flujo de migrantes, señala Obispo

Monseñor Alonso Gerardo Garza Treviño, Obispo de la Diócesis de Piedras Negras, consideró como una situación muy difícil el flujo migratorio actual por esta frontera; además de referir que es necesario cambiar las estructuras físicas y humanas para afrontarlo, porque corresponden a lo que existía anteriormente.

También señaló que las cifras de personas en condición de migración seguirán creciendo, independientemente de lo que se haga, y por ello, es importante que las diferentes organizaciones que trabajan con migrantes, unidas con las diferentes autoridades de México y Estados Unidos, examinen la realidad y pueda establecerse que se pueda hacer con ellos.

"La situación es muy difícil y la manera como se está enfrentando, corresponde a lo que había anteriormente, no a lo que existe hoy en la actualidad", fue lo que respondió el Obispo de Piedras Negras, al cuestionarle la situación del tema migratorio.

Recordó que a principios del 2019 llegó una caravana de tres mil 500 migrantes, siendo una gran sorpresa, se asustaron, dijeron que tenían que hacer y consideró que se manejó muy bien. Sin embargo, la misma cantidad de personas en condición de migrantes, llegan en un lapso de dos días y se está viendo como algo muy normal.

"Si no cambiamos las estructuras, tanto físicas como humanas, para prepararnos a un fenómeno de ese tamaño; nos vamos a ver cada vez en mayores dificultades; es muy lamentable que se cierre un puente, que traiga todas estas consecuencias para los que vivimos en la frontera", dijo Garza Treviño.

Reiteró que tiene que cambiarse la estructura, dado que el número de personas en condición de migración es mucho mayor al que era anteriormente, pues de no hacerlo, todos vamos a pagar las consecuencias.

Admitió que estamos comenzando a pagar las consecuencias, pero va a ser mayor porque el número de migrantes va a seguir creciendo, se haga lo que se haga.

"Yo consideré como aspirinita lo que se está haciendo, para el tamaño del problema o de la dificultad. Esto pide que las diferentes organizaciones que trabajan por los migrantes, unidas con las distintas autoridades, tanto de México como de Estados Unidos, examinen la realidad, la vean a fondo y entre todos podamos ver qué es lo que verdaderamente se puede hacer con ellos", concluyó Monseñor Alonso Gerardo Garza Treviño.