Debido al material con el que está construida su casa, la lluvia logró filtrarse por los rincones. (FOTOS: VAYRON INFANTE)
La intensa lluvia que azotó a la región la madrugada del lunes, sorprendió a los laguneros pero sobre todo a Violeta, cuya vivienda es de tablas y paredes de lona y hule, de entre las cuales el agua logró colarse por todos los rincones.
No vive sola, comparte su vivienda con tres de sus hijas, una de 14, otra de 10 y la más pequeña de 4 años de edad.
"Nos fue muy mal", dijo con tristeza, luego de que se viera sorprendida por la lluvia y la baja en la temperatura, que se registró de forma significativa.
En una pequeña parte que se encuentra construida con material, vive su hermana y su familia.
Preocupada y triste, Violeta asegura que no ha tenido suerte "para nada".
Y es que no pudo obtener una beca Benito Juárez que otorga el Gobierno Federal, y que consta de 875 pesos mensuales por 10 meses que dura el ciclo escolar.
También, solicitó apoyo a las autoridades, pero debido a que su madre y dueña del terreno, murió sin dejar el espacio a su nombre, no ha podido tener acceso a ningún apoyo.
Mientras tanto, fenómenos como el ocurrido el pasado lunes, seguirán dañando sus pocas pertenencias, ya que aunque ha reforzado cada esquina con más hule, es casi imposible evitar que se logre colar.
Pero Violeta también fue sorprendida por las bajas temperaturas, las cuales soporta solo con una delgada cobija en su cama, la cual comparte con sus hijas.
Actualmente, Violeta se encuentra sin trabajo, y se le ha complicado encontrar una nueva oportunidad laboral.
La joven madre espera encontrar muy pronto una oportunidad y así poder construir por lo menos un cuarto y un baño, con el que pudieran enfrentar las bajas temperaturas, así como las lluvias intensas como las registradas recientemente.
Aunque también lanza un llamado de ayuda para poder reforzar su vivienda, ante la posibilidad de que las lluvias continúen y sean igual o más intensas que las registradas el pasado lunes.
DE SU COLONIA
El panorama fuera de su vivienda no es más alentador, puesto que su calle no cuenta con pavimentación, por lo que las lluvias la han dejado casi intransitable.
El lodo y los hoyancos, se vuelven en todo un desafío para quien transite por este lugar.
