EL SIGLO DE TORREÓN
Debido a que las leguminosas forrajeras tienen un mayor contenido de proteínas y poseen mejores características que las gramíneas para el consumo del ganado, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural promueve su siembra como alternativa de alimentación para mejorar la productividad del sector pecuario en el trópico de México.
Al consumirlas, los animales transforman el forraje en carne y leche, productos de alta calidad proteica para la población, señaló el experto del Campo Experimental La Posta, perteneciente al Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), Javier Francisco Enríquez Quiroz.
Explicó que la alimentación del ganado en el trópico mexicano se realiza en pastoreo directo en praderas compuestas en su mayoría por diferentes especies y variedades de gramíneas y, en menor proporción, por leguminosas.
Aseguró que además de ser alimento para el ganado, las leguminosas arbustivas proporcionan leña, refugio, sombra y alimento a la fauna silvestre, además de fungir como cerco vivo en los linderos.
Entre sus múltiples cualidades destaca el mejoramiento del suelo, ya que aportan nitrógeno atmosférico y ayudan a controlar la erosión, resaltó el especialista.