EL SIGLO DE TORREÓN
Después de 22 años de veda, el bosque de la comunidad de Santa María de Ocotán y Xoconostle, así como de San Francisco de Ocotán volverán a la actividad forestal con un permiso de extracción anual de 60 mil metros cúbicos.
Desde el mes de febrero del 2001, se decretó la veda forestal en todo el bosque de la zona indígena y fue Ambrosio Mayorga Cerón, entonces delegado de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) el que dio a conocer la veda forestal que en ese entonces se dijo sería por 10 años para la comunidad indígena de Santa María de Ocotán y Xoconostle y para Francisco de Ocotán.
TALA CLANDESTINA, 150 % ARRIBA DE LO AUTORIZADO
La causa de esta veda fue que se detectó una sobreexplotación forestal por arriba en un 150 por ciento más a lo que estaba permitido y autorizado, esto significa que tenían permiso para extraer 70 mil metros cúbicos y estaban extrayendo arriba de los 100 mil.
La veda se decretó en el año 2001 y fue por 10 años, pero en el 2010 se amplió cinco años más y después, en el 2017 cuando concluyó la ampliación de la veda, algunos grupos iniciaron con el trabajo de un plan de manejo forestal mientras otros grupos se oponían a reiniciar con la extracción.
No fue sino hasta este año 2023 cuando la Secretaría del Medio Ambiente y recursos Naturales de la federación (Semarnat) aprobó el plan de manejo forestal por 12 años con una anualidad de 90 mil metros cúbicos de madera, de la cual 60 mil es de pino y 30 mil de encino.
ESTE AÑO EXTRAERÁN 60 MIL METROS CÚBICOS DE MADERA
Por lo pronto, de acuerdo a lo señalado por Bernabé Aguilar, diputado indígena, lo aprobado para extracción en este año es de 60 mil metros cúbicos, por lo que solo estarán extrayendo madera de pino.
El corte de madera no se concentrará solo en una región indígena, sino que se distribuye en tres: la zona de Canoas, la de Charcos y en la de la Guajolota con 20 mil metros cúbicos en cada una.
Esta extracción forestal, agregó el legislador, creará fuentes de empleo en las comunidades de la región durante el aprovechamiento de la madera, "pero también de bonos de carbono porque se trabajará al mismo tiempo en la reforestación", agregó.
GRUPOS OPOSITORES A LA EXTRACCIÓN
Reconoció que había grupos que se oponían a que se reiniciara con la explotación forestal, pero en la asamblea de hace tres semanas todos los grupos aprobaron el arranque de esta actividad suspendida en esa región desde hace 22 años.
Entre los grupos que se oponían a esta explotación forestal estaba Perfecto Cipriano, Avelino Mendoza, Carmelo Mendoza, Silvano Aguilar, entre otros, quienes dieron a conocer a esta casa editora el 07 de junio de este año que, de nueva cuenta, los responsables del saqueo del bosque tepehuano habían regresado para tratar de volver a explotarlo forestalmente.
Ese día explicaron que ya en dos ocasiones el comisariado ejidal había citado a asamblea de Santa María de Ocotán y sus 49 anexos, para tratar de aprobar el reinicio del aprovechamiento forestal, pero no había éxito en lograr el cuórum.
INCLUSO RECIBIERON AMENAZAS
Incluso, los dirigentes indígenas señalaron ese 07 de junio que varios de ellos ya habían sido amenazados de muerte, si se seguían negando al aprovechamiento forestal, pero reiteraron que no es una oposición de ellos, sino de toda la comunidad de Santa María de Ocotán y de los 49 anexos el negarse a la extracción.
"Son los mismos que andaban detrás de la tala clandestina que provocó la veda del bosque, los que ahora quieren volver a cortar árboles", dijo ese 07 de junio Avelino Mendoza.
Sin embargo, a decir del diputado indígena Bernabé Aguilar, en la asamblea de principios de este mes de agosto todos los grupos indígenas y de las corrientes de los diferentes partidos políticos, aprobaron reiniciar con esta extracción y manejo forestal.
Incluso no van a esperarse al próximo año, sino que, en los cuatro meses que quedan de este 2023 se trabajará ya en el corte de madera para cumplir con la primera anualidad autorizada.
EL PERMISO DE SEMARNAT ES POR 12 AÑOS
El permiso del corte de madera que dio la Semarnat fue por 12 años, por lo que se espera que concluya esta actividad en el año 2035, siempre y cuando se cumpla con los programas de reforestación anuales.
Sólo falta firmar los contratos con los empresarios que estarán trabajando en la extracción de la madera, pero ya eso lo está analizando la asamblea indígena que será la que realizará estos contratos y una vez firmados, arranca la extracción y manejo forestal otra vez en la zona indígena tras una veda de 10 años que duró 22.