Después de iniciar con una derrota en extrainnings, frente a Colombia, México tuvo una gran reacción para vencer de manera consecutiva al favorito Estados Unidos, posteriormente a la Gran Bretaña, mientras que en juego decisivo, la novena tricolor superó a Canadá, en juego que a la ofensiva resolvió Randy Arozarena, ese pintoresco jugador de origen cubano que ya tiene la nacionalidad mexicana, luego de que hace varios años llegó a Mérida, la ciudad que escogió para establecerse. Arozarena pudo jugar con la selección cubana, pero siempre manifestó su deseo de representar a México, en una competencia tan relevante como es el Clásico Mundial de Beisbol; el jugador de los Tampa Bay Rays, es un efectivo primer bate, que además cuenta con buena dosis de poder con el madero, un elemento muy valioso.
Un Clásico Mundial es después de las ligas mayores, la competencia de más nivel en el mundo del Rey de los Deportes, aunque por diferentes razones los equipos no pueden contar con todas sus máximas figuras. Pertenecientes a la Liga Mexicana de Beisbol, México cuenta con jugadores de la talla de Roberto Valenzuela, José Cardona, Samuel Zazueta y Hans Wilson, este último viajó inicialmente como cátcher de bullpen, pero ante la baja de Alejandro Kirk, el receptor de los Tigres de Quintana Roo se incorporó al equipo, con tan buenos resultados que frente a Gran Bretaña, impulsó las dos carreras con que su equipo superó a la novena británica. Rowdy Téllez, Alex Verdugo, Patrick Sandoval, Taijuan Walker, Jo Jo Romero, Austin Barnes y Alek Thomas, son nacidos fuera de México que han colaborado con el equipo.
Superado entonces el primer obstáculo, México avanzó como líder de su grupo, a la segunda ronda del Clásico Mundial de Beisbol, en donde ya cada juego es a ganar o morir, su rival será el segundo lugar del grupo "D", que será Puerto Rico o República Dominicana, ya que Venezuela se mantiene como el mejor del llamado "Grupo de la Muerte". México se presentó con lo mejor que tiene en su beisbol, a pesar de las ausencias de Roberto Osuna, Andrés Muñoz, Alejandro Kirk y Ramón Urías, el guante de oro en tercera base, con Orioles de Baltimore en 2022. Quizá México no tenga la misma cantidad de estrellas del beisbol como República Dominicana o Venezuela, pero nuestro país ya es reconocido como una potencia mundial del beisbol, y su próximo encuentro será una verdadera prueba de fuego.
En otro tema, resulta muy lamentable el anuncio de la Liga Norte de México, en cuanto a la cancelación de su temporada 2023, principalmente por fuertes problemas económicos en la mayoría de sus equipos participantes. Durante la temporada 2022 Unión Laguna tuvo su equipo sucursal en San Quintín, con los Freseros que resultaron subcampeones, y en ese circuito tuvieron cabida los jugadores que no hicieron el equipo de Liga Mexicana, hoy es una incógnita saber qué va a suceder con todos esos elementos, quienes tenían en la Liga Norte de México una opción para mantenerse activos y acudir al llamado de su organización a la Liga Mexicana. La situación se agrava más por el hecho de hacer el anuncio cuando ya faltaba muy poco tiempo para el arranque de las hostilidades; ahora habrá que buscar un plan "B".
En el campamento de los Algodoneros de Unión Laguna ya se reportó la mayoría de los lanzadores que están llamados a quedarse en el primer equipo, las últimas novedades fueron los estadounidenses Braden Webb, Justin Nicolino, Joseph Andrew Van Meter y Yoanis Quiala, todos ellos en busca de un lugar en la rotación de abridores, aunque la pelea por un lugar va a ser muy fuerte, con la presencia de elementos como Rafael Pineda, Aldo Montes y Luis Gámez. El cubano Jesús Manso, encargado del pitcheo en 2023, tendrá mucha tela de dónde cortar a la hora de elegir la rotación de abridores, así como el bullpen, en donde también se sumaron brazos importantes, como el zurdo venezolano ya naturalizado mexicano José Torres, Thomas McIlraith y Tyler Wilson, con todo para hacer el equipo de Liga Mexicana.
En la ofensiva también existen buenas expectativas, con la llegada de Chase Simpson a la tercera base, así como los muy posibles arribos de Kennis Vargas y Zach Kirtley, quienes además de fortalecer el orden al bate, serían los encargados de primera y segunda base, respectivamente. En este 2023 los anuncios sobre caras nuevas se han dado más pausados que el año anterior, y en estos momentos, a pesar de la inesperada salida de Jesse Castillo, el orden al bate que pueda utilizar Ramón Orantes luce redondo, con la profundidad necesaria para hacer las carreras suficientes. No echar las campanas a vuelo, porque ya se sabe que en la Zona Norte hay varios trabucos que van con todo en busca, primero del playoff, pero ya en esa instancia trascender, para mínimo pelear por el título del grupo.
