Cuando Jesse Castillo supo del interés de los Olmecas de Tabasco por llevarlo a sus filas en este 2023, el jugador cachanilla ya tenía arreglado su contrato para seguir con el Unión Laguna, a eso se debe que al surgir los rumores de su partida, Guillermo Murra Marroquín salió a desmentirlos, sin embargo, detener al bateador zurdo fue imposible por ya saben qué. Jesse ha sido siempre un jugador que ha cobrado bastante bien en los equipos que ha jugado y para regresar a Tabasco, en donde estuvo hasta la temporada 2013, solicitó un sueldo similar al de Juan Pablo Oramas y Noel Fernando Salas, ambos lanzadores caestelares en el equipo de Pedro Meré. De tal manera que Jesse se embolsará alrededor de 300 mil pesos mensuales con Olmecas, además de vivir en un fraccionamiento exclusivo de Villahermosa.
Jesse Castillo inició aquel 2013 con los Olmecas de Tabasco y todavía era un buen tercera base, mientras que el cubano Donell Linares cubría la primera almohadilla; de pronto vino una lesión de Castillo y ya recuperado solicitó al gerente deportivo, Raúl Cano, le dieran la oportunidad en la inicial; Linares pasó entonces a la antesala y pronto llegaron algunos errores del cubano, que previamente había pasado por el equipo de Laguna. Jesse Castillo fue regresado a la tercera, pero se negaba a jugar esa posición, debido a la lesión que lo había aquejado; el problema con Raúl Cano se hizo grande, ambos estuvieron a punto de liarse a golpes y fue así como Castillo pasó a los Rieleros de Aguascalientes, ya iniciada la temporada 2013. Jesse no llegó al cien por ciento con Rieleros, pero pudo hacer una buena carrera en la Ciudad de la Gente Buena.
A pesar de sus buenas actuaciones en Rieleros, para las dos mini temporadas de 2018, Castillo fue vendido a los Acereros de Monclova; nuevamente aparecía la etiqueta de “jugador conflictivo” a un pelotero que defiende sus derechos; con Monclova Jesse Castillo sufrió la peor lesión de su carrera y posteriormente vino una buena aventura con los Mariachis de Guadalajara, de donde llegó a Unión Laguna. Es indudable que Jesse es quizá el mejor bateador mexicano (nacido en México) en la actualidad, no es fácil sustituirlo y hoy en Algodoneros es evidente, sin embargo, es muy cierto que el jugador tiene un compromiso enorme con Olmecas, y está obligado a entregar resultados positivos de inmediato, porque el esfuerzo que hizo la organización, es demasiado grande, y en esa medida se espera que sea su productividad.
Es tan grande la intervención de ya saben quién en los Olmecas de Tabasco, que originalmente se había firmado un contrato de 60 millones de pesos con la empresa ORSAN, al cual se tuvo que dar marcha atrás, porque la afición tabasqueña manifestó su inconformidad por cambiarle de nombre al Parque del Centenario 27 de Febrero; la orden de Palacio Nacional llegó directamente a Gonzalo Medina González, presidente de la organización tabasqueña. Cabe recordar que la franquicia de Tabasco pertenece en su mayoría al gobierno del estado. Hoy ya se habla en Tabasco, que el lanzador Wilmer Ríos, de Acereros de Monclova, y el receptor Hans Wilson, de los Tigres de Quintana Roo, están en la mira del equipo que dirige Pedro Meré. Han sido muchos festejos por el campeonato de 1993, pero se quieren coronar con el título en este 2023.
En cuanto a los Algodoneros de Unión Laguna, Ramón Orantes parece tener algunas dudas para definir el roster para el arranque de la temporada 2023, el equipo se encuentra ya en los últimos juegos de pretemporada y aún observa a varios jugadores que finalmente quedarán fuera del equipo; hoy la mayoría de los equipos ya se manejan con un roster prácticamente definido, y eso se vio este martes en el caso de Mark Weidemaier, el piloto de los Saraperos de Saltillo, que puso toda la carne en el asador y solamente hizo dos movimientos en el infield; los otros siete elementos permanecieron las nueve entradas, mientras que en el pitcheo utilizó a cinco lanzadores, con muy buenas hechuras por parte del inicialista Chris Mazza. Saltillo va a pelear fuerte, con una ofensiva de Henry Urrutia, Rainel Rosario, José Fernández y Fernando Villegas.
En Algodoneros preocupa que Chase Simpson no le encuentra el modo al pitcheo de la Liga Mexicana de Beisbol, el estadounidense ha hecho buenas cosas en tercera base, pero su bate ha permanecido callado en la pretemporada; Chad Sedio enseña buenas manos en la intermedia, pero necesita ser más consistente con el bate. La grata sorpresa es Albert Lara, que este martes no inició el juego, pero tomó dos turnos al bate y conectó par de imparables; lo fuerte del cubano mexicano no es la defensa, pero bien podría cubrir el jardín izquierdo, y bajar a Allen Córdoba a la tercera base. Ya es necesario que Ramón Orantes y el cuerpo técnico definan el roster y con él se vayan el resto de los juegos de pretemporada; el arranque de la campaña 2023 está a la vuelta de la esquina, y es clave empezar con los mejores elementos disponibles.