Marisol asegura que su próxima meta es estudiar para especializarse en esta profesión.
"Me enamore de la profesión y del uniforme. Mi meta fue ser policía y lo logré", afirmó Marisol Guerrero, elemento de la Policía Saltillo.
Además de atender una casa, esposo e hijos, cada día miles de mujeres atraviesan el reto de trabajar y dar lo mejor de sí en su trabajo, donde desempeñan diversas profesiones y oficios, las cuales en algunas ocasiones, representan un alto riesgo de seguridad, como lo es ser policía municipal.
En el marco de la celebración del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, Marisol Guerrero Contreras, policía municipal de Saltillo, relata su experiencia de ser mujer, esposa, ama de casa, madre de familia de dos hijos y policía del municipio de Saltillo desde hace cinco años.
Fue el día de ayer que la Policía Turística en Saltillo arrancó operaciones, donde Guerrero Contreras, se encuentra comisionada.
Guerrero Contreras de 38 años de edad, a diario enfrenta el reto de combinar su profesión, donde el principal objetivo es mantener la seguridad de los ciudadanos, con el resto de los deberes.
Aunque uno de sus hijos tiene 22 años y ya trabaja, aún se hace cargo de atender a su esposo, así como a otro hijo menor de 12 años, al cual cada mañana lo alista para que acuda a la primaria, mientras que a su regreso de su trabajo a casa continúa con el resto de las labores hogareñas.
Marisol Guerrero es parte de la Policía Turística, luego de cinco años de servir como policía municipal y atender tareas de alto riesgo.
"Para mi es una nueva etapa, me siento muy feliz de ser parte de la policía turística, pues voy a cumplir cinco años dentro de la policía municipal", dijo.
Recordó que su formación inició en la Academia de Policías donde se capacitó en un periodo de seis meses con tareas de acondicionamiento físico, uso de armas, primeros auxilios, justicia cívica, entre otros.
Marisol Guerrero, manifestó que antes de formar parte de las filas de seguridad, trabajó en una tienda Oxxo en la entidad, donde se fijó como meta pertenecer a la corporación policíaca.
"Me gusta la profesión, yo me enamoré del uniforme hace cinco años. Trabajaba en un Oxxo, al cual iban muchas mujeres y hombres policías, por lo que me nace el interés; me propongo y lo logré. Gracias a Dios metí mi papelería y pasé mis exámenes de control y confianza", recordó.
Manifestó que fue su decisión pertenecer a la policía turística, pues anteriormente estaba comisionada El Mirador. "Ahí se enfocan mucho en el turismo con las personas foráneas, lo que me llamó la atención", dijo.
Resaltó que en la policía turística, alrededor del 30 % son mujeres, lo que representa alrededor de 300, las cuales recibieron una capacitación de turismo tanto por el Municipio y el Estado.
Para Marisol la siguiente meta es estudiar para especializarse en esta profesión, la cual demanda el aprendizaje de idiomas para interactuar con los extranjeros.