La Odontología deportiva consiste en el estudio, control, prevención y tratamiento de las lesiones bucales y faciales, con el fin de mejorar el rendimiento físico del deportista. Todas las personas que practican algún deporte deben de tener excelente salud general y bucal, ya que hay una serie de patologías, como el mal alineamiento dentario, (mal oclusión) pudiendo provocar dolores musculares a nivel de cuello, cabeza, cara y cavidad oral.
La mal oclusión dental está relacionada con defectos en el equilibrio. La enfermedad periodontal, caries dental, son causadas por bacterias, estas originan problemas de salud general, es importante mantener sus órganos dentarios sanos, evitar el alto consumo de hidratos de carbono y de bebidas azucaradas para rehidratarse. Así como mantener una excelente higiene bucodental.
Cuando no tiene buena salud bucal, independientemente de los traumas o golpes que puedan recibir dentro del deporte influyen directamente en el rendimiento de un deportista, con efectos como dolores de cabeza, enfermedades cardiacas (endocarditis), trastornos digestivos, osteopatía y problemas musculares.
Si tienes alguna lesión muscular con cierto nivel de persistencia tendiendo a cronicidad y no te desaparece por mucho que hagas sesiones de fisioterapia, es muy recomendable acudir con tu odontólogo. Las afecciones cráneo mandibulares, la mal oclusión, el bruxismo, no sólo afectará a las piezas dentales (desgastes) sino que también provocará dolores a nivel de la musculatura de la cabeza, cuello y espalda.
Acudiendo al odontólogo especializado, sabrá recomendarte cuales son los lineamientos para seguir. Analizará tu posición general del cuerpo, no solo la boca, relacionará tu cara, (ojos nariz, boca) a tus hombres, espalda, hombros, pies, te hará una adecuada historia clínica relacionada a tus músculos, huesos, teniendo el diagnostico te recomendara lineamientos a seguir.
Guardas terapéuticos, lentes especiales, plantillas, recuerda que somos un ser integral, y la boca no está separada de él, por lo tanto, este estudio es muy importante.
Deportes acuáticos: buceo, natación, en ocasiones presentan problemas dentarios, por la presión subacuática y la utilización de boquillas o cánulas para bucear. Cuando hay problemas con la articulación temporomandibular, la retención de la boquilla inicia o empeora el problema.
El agua fría, causa también síntomas de disfunción temporomandibular, el dolor también se presenta en el oído medio, por la presión de los labios del buzo, por esta misma presión, se presentan fracturas de los dientes al subir a la superficie, se considera que esto sucede por la expansión de gas por debajo de las restauraciones inadecuadas, o espacios de aire entre el metal y la porcelana. Dado que los cambios de presión motivan a veces la diseminación de una infección, las personas con inflamación aguda o infección de los tejidos dentoalveolares o maxilofaciales no debe bucear.
Los buzos con extracciones o intervenciones quirúrgicas recientes también pueden sufrir dolor o hemorragia. Si presenta prótesis removible o totales puede desalojarse, situación que nos causará mayores peligros como dificultad respiratoria o aspiración del aparato. En esta época de vacaciones, si piensas hacer algún tipo de deporte acuático, te recomendamos una previa valoración con un Odontólogo especializado en el tema, certificado. (Continuará).