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Actualmente, la Liga MX vive un caos a nivel administrativo, lo que ha generado polémica durante lo que va del apertura 2023.
Alineaciones indebidas y reprogramaciones de partidos por la participación de equipos locales en torneos internacionales y eventos ajenos al futbol han manchado el torneo.
El último escándalo se dio esta semana, luego del partido entre Chivas y Mazatlán FC, jugado el martes, donde el conjunto sinaloense colocó a Joaquín Esquivel en el banquillo, quien acumulaba cinco tarjetas amarillas, y por reglamento no podía estar ni en la banca.
Aunque Chivas presentó su denuncia ante la Femexfut, la Comisión Disciplinaria habría cometido un error al no notificarle a los Cañoneros esta situación, por lo que no podían sancionar a los de Mazatlán, quienes vencieron al Guadalajara 3-1.
En la jornada 7 ocurrió una situación similar, en el encuentro Puebla vs Tijuana. El auxiliar técnico de los poblanos, Luis Noriega, estuvo en la banca sin estar registrado ante la FMF, lo que causó que los de la franja perdieran el encuentro en la "mesa", el cual habían ganado 3-0 en la cancha.
Otra situación que ha afectado al torneo local son las reprogramaciones. En julio pasado, la Liga Mx estuvo parada por cuatro semanas por la participación de equipos mexicanos en la Leagues Cup de EU.
Y recientemente, las presentaciones del cantante Weeknd provocarán cambios en los partidos de Chivas y Monterrey.
