Por decisión de la empresa foránea que ganó la licitación, 30 locales de bordado de Durango quedaron fuera del proyecto de los uniformes escolares.
Aproximadamente 30 locales de bordado de Durango quedaron fuera del proyecto de los uniformes escolares, por decisión de la empresa foránea que ganó la licitación, por lo que perdieron la oportunidad de recuperarse luego de varios años complicados, desde la pandemia.
"Tuvimos que reestructurar nuestras finanzas para salir a flote porque impuestos seguimos pagando, nómina seguimos pagando, Seguro Social seguimos pagando, nadie nos descontó ni un centavo, ni dejamos de pagar ni nos dieron la oportunidad de: 'espérese mientras pase a la pandemia'; nosotros seguimos pagando y teníamos cerrado", comentó María Cristina Trujillo, propietaria de un taller textil.
Por lo que ésta decisión les afecta considerablemente. "Todos estamos esperando tener la oportunidad de recuperarnos un poquito, ya no es ni siquiera la pérdida, sino la posibilidad de poder solventar todo lo que se quedó atrás", lamentó.
Y la situación es aún más difícil para las empresas pequeñas. "Yo me acuerdo que talleres de bordado mínimo éramos como 30 y a raíz de los uniformes muchos talleres sociales también que tenían el armado de prendas tuvieron la oportunidad de hacerse de una máquina bordadora, de alguna máquina chiquita para complementar su taller y ellos también bordaban; entonces ellos pueden tener trabajo de armando de las prendas; sin embargo, sus máquinas ya las tienen paradas y ya no las van a volver a usar por lo visto porque si ya no nos van a dar la oportunidad, pues ya no las van a usar en un contrato tan grande", indicó.
Y es que, agregó, el gobierno tampoco los toma en cuenta en contratos para la fabricación de otro tipo de uniformes, como los de salud o de otras áreas.