Exigen a Gustavo Petro, atender la emergencia que viven las comunidades.
Al menos 2,820 indígenas del departamento colombiano del Chocó, fronterizo con Panamá, están confinados y en riesgo de desplazamiento forzado por posibles enfrentamientos armados entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Clan del Golfo, la principal banda criminal del país.
Así lo denunciaron en un comunicado Autoridades Tradicionales Indígenas de Colombia en el que señalan que "más de 2,820 indígenas del pueblo wounaan, se encuentran en riesgo de desplazamiento forzado".
Las comunidades indígenas afectadas viven a lo largo y ancho de la cuenca media y baja del río San Juan, en el departamento del Chocó.
La información añadió que los indígenas fueron advertidos por los grupos armados ilegales de que no podían moverse por cuanto "es inminente una confrontación, pero también porque se han sembrado minas antipersonales alrededor de nuestras comunidades, afectando nuestro derecho a la libre movilidad y con ello provocando un confinamiento masivo de las comunidades indígenas".
Añadieron los indígenas que esa situación derivará en la escasez de alimentos, que más de 600 niños no puedan recibir sus clases y que tampoco podrán llevar enfermos para su atención médica a la cabecera municipal.