Equipo industrial ingresa a Altos Hornos. (SERGIO A. RODRÍGUEZ)
Los trabajadores sindicalizados que por casi 8 meses mantuvieron bloqueados los accesos a AHMSA, levantarán los plantones durante una semana, para permitir la llegada de posibles accionistas. Por la tarde de este viernes empezó a llegar maquinaria a AHMSA.
El obrero Alfredo Reyna, trabajador de AHMSA 1, explicó que el gobierno estatal le solicitó a los trabajadores retirar el bloqueo “de miércoles a miércoles” para la llegada de gente a la industria.
El trabajador explicó que los sindicalistas apostados en las entradas de la metalúrgica acordaron quitar mesas, lonas y tiendas de campaña de los campamentos establecidos en las puertas del Punto 9 y Punto 0 de la metalúrgica.
“Nos dijeron que ofrecerían un mal aspecto y darían una mala imagen a los visitantes y accedimos a retirar nuestras cosas” dijo.
Agregó que acordaron permanecer en las puertas de acceso a AHMSA por el área interior, para asegurarse de que no sacarían material, herramientas o maquinaria.
Explicó que el bloqueo lo realizó porque por órdenes de la empresa ingresaban camiones para llevarse materiales e insumos para venderlos. “Nos decían que era para nuestros sueldos, nos pagaban una o dos semanas y nos dejaban de pagar” dijo.
Afirmó que lo que en realidad hacían era saquear la industria y los obreros decidieron impedirlo cerrando las entradas.
Llega material a la empresa
La tarde de este viernes camiones con lo que parecen ser piezas de maquinaria nuevas llegaron a la siderúrgica. Por el Punto 0, en la entrada que lleva al Libramiento Carlos Salinas de Gortari, camiones de carga arribaron al sitio con maquinaria.
Los trabajadores sindicalizados observaron el ingreso de los equipos, que fueron internados en la siderúrgica. No hubo obreros, representantes sindicales o de la empresa que informaran sobre estos equipos.
Altos Hornos de México está paralizada desde diciembre de 2022 y en proceso de concurso mercantil. No ha podido cambiar el Consejo de Administración a su presidente, Alonso Ancira. Esta situación no ha permitido que nuevos inversionistas inyecten recursos financieros para pagar algunos pasivos, salarios y volver a producir para cumplir a los más de mil 600 acredores.