VARIACIONES OPUS 33 SOBRE EL TEMA DE DON JUAN
Ninguna de las mujeres que amaron a Don Juan puede olvidarlo.
Todavía, después de muchos años, se les aparece en sueños. Esos sueños son tan ensoñadores que las damas que los sueñan tienen que ir luego a confesarse.
Don Juan también las sueña, pero no necesita buscar absolución. Su mismo sueño lo absuelve. Para Don Juan, igual que para el clásico, la vida ha sido un sueño, y cuando va a su lecho espera soñarla. Esto es decir que espera volver a vivirla.
Ayer el caballero sevillano se topó con una de sus antiguas enamoradas en el paseo del Guadalquivir. Ella lo vio tan viejo ya, y tan triste, que procuró alegrarlo. Le dijo con la misma llaneza de la juventud:
-La otra noche te soñé.
Le contestó Don Juan:
-Yo te sueño todo el día.
Mentían los dos, pero su mentira era verdad.
¡Hasta mañana!...