Un juez de Nueva York aprobó este viernes el cambio de equipo de defensa de Harvey Weinstein. (AP)
El tema de la violencia marcó este domingo el tercer y último debate presidencial, en el que Xóchitl Gálvez insistió en ligar al Gobierno con el narcotráfico, mientras que Claudia Sheinbaum defendió los resultados en seguridad.
"La seguridad ha sido un fracaso en este sexenio, 186 mil personas asesinadas, 50 mil personas desaparecidas. ¿Y cuál ha sido la estrategia de este Gobierno? Entregarle el país al crimen organizado", expresó Gálvez, de la coalición opositora Fuerza y Corazón por México.
La aspirante defendió llamarle "narcopartido" al Movimiento Regeneración Nacional (Morena), al afirmar que agencias de seguridad de Estados Unidos indagan a su dirigente, Mario Delgado, por "huachicoleo" de combustible.
Gálvez también citó el nuevo libro de la periodista Anabel Hernández, 'La historia secreta: AMLO y el Cártel de Sinaloa', que indaga los supuestos nexos del narcotráfico con el mandatario federal.
Por su parte, Sheinbaum defendió la política de seguridad de López Obrador, al alegar que la crisis de homicidios comenzó con la "guerra contra el narco" durante la presidencia de Felipe Calderón (2006-2012).
"Hasta que llegó el presidente López Obrador y cambió la política, de declarar la guerra a construir la paz, que es una visión completamente distinta, que sí es atención a causas y cero impunidad", argumentó.
