Atrapado en los 70’s
Un privilegio es haber nacido en 1966, un año que se destacó por su música en inglés, en plena invasión británica y marcó el inicio del rock psicodélico.
Yo crecí escuchando esa música, inculcada por mis padres y transmitida a través de la radio.
Esas melodías se englobaban como “rock’n ‘roll”, aunque el término abarcaba ya muchísima variedad de géneros, desde el country hasta lo psicodélico; era la época de los hippies y los grandes movimientos juveniles de protesta por una guerra innecesaria, la guerra de Vietnam.
Crecí cantando en inglés, aunque no supiera el significado todavía de esas letras, las tengo muy grabadas en mis recuerdos y cada vez que vuelvo a escuchar un tema de entonces, me viene un flechazo y me transporta en el tiempo.
Es un privilegio haber pasado esas décadas escuchando en la radio esas melodías que estaban de moda en el mundo. Los sesenta y los setenta vieron el nacimiento de muchísimos consagrados como: The Beatles, Rolling Stones, The Who, The Kinks, Led Zeppelin, Pink Floyd, Deep Purple, Donovan, Bob Dylan, The Hollies, The Zombies, Creedence, entre muchísimos más que pasaron de los sesenta a los setenta con más fuerza todavía.
Conforme crecíamos, evolucionábamos nuestro gusto musical. Este se iba definiendo y depurando.
Considero que haber nacido en 1966 fue el punto exacto para apreciar de raíz e ir junto con las tendencias, las modas y la evolución musical.
Vivir la separación de Los Beatles, sus trabajos como solistas, el surgimiento de Pink Floyd y Led Zeppelin y los nuevos sonidos que iban surgiendo en un mundo de descubrimientos, de experimentos y de grandísimo crecimiento y riqueza musical fue algo único; se iba el rock psicodélico y surgían nuevos sonidos con el rock progresivo, el hard rock, el heavy metal, el punk, los inicios de la música electrónica, el soul, el R&B, el reggae, entre otros.
Fui testigo del surgimiento de otro grupo de cuatro genios en Londres, cuando Freddie Mercury, Brian May, John Deacon y Roger Taylor formaban la banda Queen, empezando con hard rock y rock progresivo y se fueron adaptando a las tendencias y los cambios. Haber vivido en esa época de las consolas caseras, comprar esos long plays de nuestros grupos favoritos y esperar el siguiente, fue un privilegio, ¡qué recuerdos!
Haber pasado la década de los setenta en una edad de los cuatro a los catorce años, me dio una vista espectacular y panorámica de todo el movimiento musical.
Creo que la evolución musical se fue dando, para mí, de manera simultánea con mi propio crecimiento biológico personal, de tal manera que ir experimentando esos cambios me fue marcando la vida, decía Lennon en una de sus frases célebres: “Eres la música que escuchas”, y efectivamente la música influye en tu personalidad, en tus valores, en tu forma de ver la vida, la música que escuchas dice mucho de quién eres y la visión que tienes del mundo.
La música que escuchas va de la mano con tus recuerdos, con tus vivencias y es una vía perfecta para la nostalgia, es como una máquina que te transporta en el tiempo por un instante.
Actualmente, al voltear atrás y ver lo que se ha dejado como legado musical a lo largo de las décadas, se tiene esa perspectiva y esa autoridad de decir: Yo viví en los sesenta y en los setenta, yo viví la transformación de muchos grupos de rock que mutaron en pop en la década de plástico, la década de los ochenta, el resurgimiento de la creatividad artística y escuchar otra vez las guitarras limpias en los noventa con el rock alternativo (lo cual será tema de otra colaboración como “Atrapado en los noventa”) a una edad más madura es toda una experiencia, parece que fue ayer, pero el rock alternativo tiene ya casi cuarenta años de antigüedad, ¿qué tal?
La música te define y, aunque estoy atrapado en los setenta mi espectro abarca cuatro décadas de buena música.
“Eres la música que escuchas”, decía Lennon, imagina qué diría si escuchara los sonidos actuales, la decadencia en la que estamos inmersos, la muerte del rock y de toda una época.
Amigos el espacio se acaba y el tema da para más, yo como siempre haré mi reflexión de que hace falta una radio, ya no digamos una radio, sino un espacio, un programa en vivo para ese público cautivo de gente que nos hemos quedado atrapados en los setenta por nostalgia, por gusto o por la ausencia y desaparición del buen rock a cambio del ruido actual, lo cual será tema de otra colaboración.
¡Amigos atrapados en los setenta, nos seguimos leyendo en la próxima!
Contacto: saulgarciamtz@hotmail.com
