El proyecto Nazas Vivo, que busca restablecer el flujo de agua por el lecho del río Nazas, fue considerado como viable por Gabriel Riestra Beltrán, director del Organismo Cuencas Centrales del Norte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Sin embargo, el funcionario advirtió que se trata de una iniciativa compleja que requiere estudios técnicos detallados para determinar su impacto real en el acuífero principal de la Región Lagunera.
“Esperemos que haya viabilidad. No es un tema que se resuelva en cinco minutos, pero tampoco estamos diciendo que no se pueda. El río ha corrido antes, hay antecedentes. En 1968, por ejemplo, hubo una avenida que duró casi diez días y provocó una de las inundaciones más fuertes en la región”, señaló.
El funcionario explicó que, aunque históricamente el río ha mantenido su cauce, no existe actualmente un estudio que confirme si el flujo de agua por el Nazas contribuye directamente a la recarga del acuífero.
“No puedo afirmar que si corre el río hay recarga. Hay zonas donde la recarga viene hacia el río, no del río hacia el acuífero. Necesitamos estudios para entender esa interacción”, indicó.
El movimiento Nazas Vivo, de acuerdo a sus creadores, surge de una preocupación profunda por la sobreexplotación del acuífero en la Comarca Lagunera, donde no basta haber obtenido el fallo a favor en la demanda 543 ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que busca nivelar la extracción, sino que es necesario también impulsar la recarga natural del acuífero mediante la liberación de un flujo de agua hacia el río.
Datos de los módulos de riego indican que sólo el 40 por ciento del agua liberada para riego agrícola llega realmente a los cultivos, mientras que el resto se pierde por evaporación o, incluso, robo. La activación del cauce del Nazas podría canalizar parte de ese volumen para fines ecológicos y sociales, además de fortalecer el proyecto Agua Saludable para La Laguna.
La propuesta es devolver el agua al río urbano, en una primera etapa de 30 a 40 kilómetros entre la presa San Fernando y la represa del Cuije. Actualmente, la UNAM realiza un estudio para evaluar el estado del acuífero y proponer estrategias de gestión. Mientras tanto, se considera que al menos entre 100 y 200 millones de metros cúbicos podrían destinarse al caudal ecológico del río urbano si se mejora la eficiencia en el manejo del agua superficial y se combate el tráfico ilegal de agua.