El Siglo de Torreón / Enrique Castruita
El arte tiene la capacidad de transformar miradas, de sembrar preguntas y de expresar lo que a veces no puede decirse con palabras. Y eso fue justo lo que sucedió en la reciente edición de la Expoarte del Colegio Cervantes de Torreón, un evento que reunió a estudiantes, docentes y familias en una celebración de talento, imaginación y sensibilidad.
Los pasillos del colegio se convirtieron en una galería viva donde se exhibieron pinturas, dibujos, esculturas e instalaciones creadas por los propios alumnos. Cada pieza fue una ventana abierta al universo personal de quienes la realizaron, temas sociales, paisajes oníricos, retratos íntimos, colores que hablaban por sí solos. Más allá de la técnica, lo que conmovía era la autenticidad de las propuestas.
La Expoarte no fue sólo una muestra, sino una afirmación, la juventud tiene mucho que decir, mucho que imaginar, y es en estos escenarios donde florece lo mejor de ellos. Porque cuando se les brinda libertad para crear, los jóvenes no solo participan, brillan.