Multan a quinta por menores y venta de alcohol
La quinta para eventos sociales clausurada el fin de semana en Monclova, tras detectarse la venta de bebidas alcohólicas y la presencia de menores consumiéndolo, pagó una multa administrativa.
Así lo informó Andrés Sáenz Armendáriz, director de Padrones de la Secretaría de Finanzas en la Región Centro, quien explicó que el cierre fue resultado de un reporte y operativo interinstitucional.
El funcionario señaló que el operativo conocido como “Bom” (Base de Operaciones Mixtas) recibió el aviso de vecinos que alertaron sobre una fiesta con venta de alcohol y presencia de menores en el interior.
Al llegar al lugar, las autoridades constataron la irregularidad, colocaron sellos de clausura y detuvieron a los encargados del evento, quienes fueron puestos a disposición de Seguridad Pública Municipal.
Sáenz Armendáriz explicó que el evento se desarrollaba con cobro de “cover”, música en vivo y consumo libre de alcohol, situación que derivó en la sanción del inmueble y los organizadores.
Dijo que el propietario de la quinta colaboró con las autoridades y reveló quiénes habían organizado la fiesta, pues él desconocía la naturaleza del evento y no participó en su desarrollo.
Indicó que, además del pago de la multa correspondiente, el aseguramiento de las bebidas alcohólicas quedó bajo custodia, como lo establece el reglamento estatal de control de bebidas.
El funcionario recordó que el caso ocurrió en el contexto de las festividades de Halloween, temporada en la que suelen aumentar los eventos juveniles en quintas y salones particulares.
Autoridades advierten sanciones a organizadores y dueños
Andrés Sáenz advirtió que los dueños de quintas o salones de eventos están sujetos a sanciones si no notifican las actividades o permiten fiestas sin permisos de protección civil.
Explicó que el costo promedio por renta de una quinta oscila entre los dos mil 500 y cinco mil pesos, pero que no justifica el riesgo legal por omitir los requisitos.
Recordó que todos los establecimientos deben cumplir con el pago de derechos, permisos municipales y licencias, además de la obligación de garantizar que no se permita el acceso a menores.
Enfatizó que las multas pueden ser elevadas y que, en casos graves, el inmueble puede ser clausurado de manera definitiva si se acredita reincidencia o desobediencia a las autoridades.
Asimismo, señaló que las bebidas embriagantes y los cobros de entrada no están permitidos en espacios de uso familiar, por lo que cualquier irregularidad será motivo de sanción inmediata.
“Estamos pidiendo a los propietarios que tengan precaución con el tipo de eventos que autorizan; deben verificar quién los contrata y qué tipo de público asistirá”, comentó.
El director de Padrones reiteró que las autoridades municipales y estatales mantendrán los operativos de verificación durante las próximas semanas para evitar fiestas clandestinas con menores.
Mencionó que, aunque no se consignaron adolescentes a la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia, sí se resguardó a varios asistentes hasta que llegaron sus tutores.
Finalmente, Sáenz Armendáriz exhortó a los propietarios de quintas a reportar cualquier intento de organización de eventos masivos o con venta de alcohol, para prevenir sanciones y clausuras.