Recuperarán ganaderos exportadores 70% las pérdidas con programa de gobierno
El gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez Salinas, anunció la puesta en marcha de un programa especial de apoyo para pequeños productores ganaderos, con una inversión superior a 600 millones de pesos. La estrategia busca mitigar las pérdidas derivadas del cierre temporal de exportaciones por el brote del gusano barrenador, ofreciendo alternativas de comercialización en el mercado nacional.
El mandatario detalló que el proyecto contempla tres ejes principales. El primero consiste en créditos subsidiados al 8 por ciento de interés anual para que los productores engorden su ganado y lo vendan con mayor valor. Con esta medida, explicó Jiménez, los ganaderos podrán recuperar hasta el 70 por ciento de las utilidades que han dejado de percibir por no exportar.
Un segundo eje será la rehabilitación y certificación de los rastros de Monclova y Villa Unión como Rastros TIF, además de instalar una empacadora en Monclova. Esto permitirá que los productores comercialicen carne certificada y empacada, incrementando sus ganancias, incluso por encima de lo que obtenían con la exportación.
En un tercer punto, se ampliará el subsidio para el programa genético de toros, pasando de 20 mil a 35 mil pesos por ejemplar, lo que representa un aumento cercano al 70 por ciento. Asimismo, se destinarán recursos para fortalecer el centro de subastas de Múzquiz, con el fin de ofrecer mayores opciones de comercialización para los ganaderos locales.
Respecto a la situación de Altos Hornos de México (AHMSA), el gobernador indicó que, según información del equipo de la presidenta Claudia Sheinbaum, la liquidación a los trabajadores podría concretarse entre finales de este año y principios del próximo. Posteriormente, se definiría al comprador de la acerera, con lo que iniciaría su reactivación.
Jiménez Salinas precisó que existen al menos un par de interesados, tanto nacionales como extranjeros, en adquirir la planta. Subrayó que la salida del caso solo será posible con la intervención directa del Gobierno Federal, del mismo modo en que hubo participación presidencial en el proceso que llevó a la crisis de la empresa.
En materia de seguridad, el mandatario llamó a los comerciantes a denunciar cualquier intento de extorsión, en especial las llamadas telefónicas que se originan desde centros penitenciarios del país. Aseguró que en Coahuila no se permitirá la práctica del “cobro de piso” y que los delincuentes toparán con las instituciones del Estado.
Finalmente, el gobernador adelantó que se avecinan nuevas inversiones en la región Centro-Desierto, con expansiones industriales y la llegada de nuevas plantas, lo que generará cientos de empleos. Añadió que esperan mayor certidumbre en materia arancelaria para reactivar los pedidos de empresas estadounidenses relacionadas con el sector ferroviario, lo que daría un impulso adicional a la economía estatal.
