Ángeles, Mónica y María.
En el área de damas de Cimaco Plaza Cuatro Caminos se vivió una encantadora tarde de bingo que reunió a clientes leales en un ambiente relajado y muy animado. Entre tarjetas, llamados y premios, los asistentes disfrutaron de una experiencia pensada especialmente para agradecer su preferencia y constancia a lo largo del tiempo.
Cada participante celebró con entusiasmo cada ronda, creando un momento especial donde se hizo evidente el cariño y la cercanía que Cimaco mantiene con quienes han formado parte de su historia. Una tarde que dejó sonrisas, buenos recuerdos y un sincero agradecimiento para todos los presentes.






